La Audiencia Provincial ha condenado a una pena de cuatro años y seis meses de prisión a un hombre de nacionalidad marroquí, autor de un delito contra la salud pública, al ser interceptado en un control de tráfico en la Autovía del Norte (A-1), a la altura de Sepúlveda, con casi 22 kilogramos de drogas. Además, se le impuso una multa de 150.000 euros con responsabilidad personal subsidiaria de 60 días de privación de libertad, así como al abono de los costes del proceso.

El condenado, con antecedentes por tráfico de drogas y en prisión provisional, fue interceptado en compañía de otra persona sobre las dos de la madrugada del 17 de junio de 2016, cuando viajaba en un vehículo por la carretera A-1, sentido Burgos. El turismo ocultaba un paquete envuelto en plástico de color marrón bajo el asiento del copiloto y 20 más en los paneles de la carrocería.

Después de los análisis pertinentes, el total de las sustancias interceptadas sido de 49,95 gramos de heroína, 1.001,98 gramos de cocaína y 19.640 gramos de resina de cannabis. Todo ello, con un valor en el mercado ilegal de 135.238,75 euros.